Como todos sabemos, la pasta está riquísima pero tiene un alto contenido de calorías, lo mismo que las salsas que la acompañan. Por esto, si estás intentando hacer dieta pero la echas de menos, nosotros te damos unos consejos para evitarlo.
La idea está sustituir la pasta por verduras cortadas de una manera similar. Por ejemplo, necesitamos un calabacín y un pelador que usamos para las patatas. De ello, saldrán finas láminas que pueden sustituir a los tallarines con un poco de imaginación.
Aunque si quieres un acabado más profesional entonces necesitarás un espiralizador de verduras. Los brotes de soja también pueden ayudar en nuestro cometido, al mismo tiempo que también lo harán los fideos de tofu que ya vienen listos.
Con esto no estamos diciendo que saques radicalmente de tu dieta la pasta, pero sí que la reduzcas. Además, si quieres alguna salsa con ella, nada mejor que sea natural, con tomate fresco.