De vez en cuando, es bueno que nos demos caprichos en forma de postres, ya que, sin abusar estamos dejando la ansiedad de lado y saboreando algunos alimentos que no solemos tomar. El capricho que hoy os propongo tiene como ingrediente principal la piña, por lo que estamos en buenas manos.
La piña, como sabemos es un alimento que debemos de consumir si queremos bajar de peso, pero en este caso, al llevar azúcares y terminarlo con más dulce, lo hace un tanto prohibido para algunas dietas.
Abrimos una lata de piña y cortamos las rodajas en trocitos, que iremos echando en una sartén con tres cucharadas de azúcar. Dejamos que tomen un color suave y dorado. Mientras, mezclamos 150 gramos de harina con una pizca de sal, una cucharada de levadura y otro poco de azúcar.
Añadimos un poco de aceite a esta mezcla, y también un poco del jugo de la piña. Cuando tengamos los trocitos de la piña en su punto, los pasamos por la batidora y los agregamos a la masa anterior, mezclando bien.
En una sartén con aceite muy caliente, iremos echando cucharadas de la masa y haremos los buñuelos. Los escurriremos y los empaparemos en azúcar. ¡Riquísimos!.