Cuando se nos taponan los oídos es bastante incómodo y, como sabemos, puede aparecer por diversas causas momentáneas, ya que si es al contrario lo mejor es acudir al médico para evitar que haya algún mal mayor. Nadie se escapa a esta sensación, así que, hoy veremos algunos remedios más comunes.
Por un lado, cuando viajamos en avión tanto en el despegue como en el aterrizaje sufrimos los cambios de presión que nos llevan a unos oídos taponados. Para ello, lo mejor es masticar un chicle.
Al bostezar también se puede aliviar esta sensación o apretar la nariz con los dedos, respirar hacia fuera y al no poder pasar el aire, la presión que genera saldrá a través del oído. Si estás resfriado, entonces opta por algún tipo de medicamento para aliviar la congestión.
También hay que tener mucho cuidado cuando se hace submarinismo y volvemos a la superficie. Con los más pequeños también la precaución se dispara porque son más propensos a infecciones en esta zona.