Los 10 beneficios de la leche para la salud

1. Fortalece los huesos

La leche y los productos lácteos proporcionan calcio, fósforo, magnesio y proteínas esenciales para la formación y reparación óseas. Un consumo adecuado de estos productos a lo largo de toda la vida permite mantener la densidad ósea en niveles adecuados, protegiendo contra enfermedades como la osteoporosis.

2. Favorece la salud de los dientes

La concentración de calcio y fósforo en la leche y los productos derivados es beneficiosa para el desarrollo y el mantenimiento de la salud de los dientes. La proteína más abundante de la leche, la caseína, ayuda a prevenir las pérdidas de calcio y fósforo del esmalte cuando los dientes están expuestos a alimentos muy ácidos.

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3. Mejora la presión arterial

Un número creciente de estudios sugiere que consumir entre 2 y 3 porciones de leche y derivados como parte de una dieta saludable puede ayudar a reducir la presión arterial tanto en adultos como en niños.

4. Ayuda a mantener una buena salud cardiovascular

Varios estudios indican la relación entre el consumo de leche y el bajo riesgo de enfermedades cardiovasculares. Esta unión puede deberse a varios componentes presentes en la leche, pero está principalmente relacionada con el calcio. La ingesta diaria de calcio puede reducir los niveles de colesterol LDL en la sangre y evitar su oxidación, lo que ayuda a prevenir la incidencia de enfermedades cardiovasculares.

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Además, algunos científicos creen que el consumo regular de calcio ayuda a evitar la absorción de grasas saturadas en el intestino evitando su acumulación en la sangre.

5. La leche previene la obesidad

El consumo de leche y derivados como parte de una dieta completa, variada y equilibrada se asocia al mantenimiento de un peso corporal sano y a una disminución de la acumulación de grasa visceral.

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6. Previene la diabetes tipo 2

En un estudio realizado en más de 37000 mujeres de mediana edad, se descubrió que las que consumían leche y derivados con bajo contenido en grasa tenían un riesgo bajo de desarrollar diabetes tipo 2. En 2005, otro estudio hizo hincapié en el primero, aunque por cada porción extra de leche o derivados con bajo contenido en grasa consumidos, el riesgo de incidencia de diabetes tipo 2 era bajo. Se cree que esta combinación puede estar relacionada con el bajo índice glucémico de la leche y sus derivados, además de su riqueza en calcio y magnesio.

7. Previene el cáncer

Un estudio realizado en 45000 hombres Suecos demostró que los hombres que bebían 1 vaso y medio o más de leche al día tenían un 35% menos riesgo de desarrollar cáncer que los que consumían menos de 2 vasos por semana. Otro estudio realizado en cerca de 40000 mujeres Noruegas concluyó que las mujeres que bebían leche durante la infancia y que seguían consumiendo durante la edad adulta tenían un bajo riesgo de desarrollar cáncer de mama. El calcio y el ácido linoleico conjugados, presentes naturalmente en la leche, se indican como razones para esta protección.

8. La leche hidrata

La leche es una excelente elección para la hidratación corporal porque es muy rica no sólo en agua, sino también en minerales.

9. Favorece la salud ocular

La leche es rica en vitaminas B2 y la leche contiene dos componentes esenciales para el mantenimiento de la salud ocular.

10. Proporciona aminoácidos esenciales

Los aminoácidos esenciales son los que el cuerpo humano necesita buscar en fuentes externas. En comparación con la carne o el pescado, las proteínas de la leche son aproximadamente un 20% más ricas en aminoácidos esenciales. La leche es muy rica en proteínas y aminoácidos esenciales (que nuestro cuerpo no produce). Siempre que la alimentación respete las proporciones de la rueda de los alimentos, las necesidades diarias de proteínas en los adultos sólo se cubren con medio litro de leche, un huevo y entre 100 y 150 g de carne o pescado.

Si elimináramos la leche, tendríamos que aumentar a unos 220 a 350 gramos de carne o pescado, lo que sería mucho más caro. En Noruega, el reconocimiento de los beneficios nutricionales y económicos de la leche ha llevado a los gobernantes a popularizar el precio de la leche y a subvencionar su producción durante años.

Beneficios nutricionales del yogur

A algunos les encanta el yogur y otros los odian. Sin embargo, se aconseja el consumo regular de este alimento, teniendo en cuenta que proporciona nutrientes extremadamente importantes para el organismo y que son indispensables para una alimentación sana.

Al no ser nada parecido al alimento que hoy es, las referencias a la leche fermentada que está en el origen del yogur se remontan a la antigüedad, y la tradición de su confección se ha transmitido oralmente a lo largo de los cultivos. De hecho, hay palabras sobre los alimentos precursores del yogur en las civilizaciones más diversas de la antigüedad, como mayzoom en Armenia, kast en Persia, benraib en Egipto o yoguut en Turquía.

yogur natural

Por lo demás, la palabra yogur es de origen turco. Se llama yogur un producto fresco obtenido por acción fermentativa de las bacterias lácticas (llamadas fermentos) Lactobacillus bulgaricus y Streptococcus termophilus sobre la leche, por lo que el yogur es un derivado. Estas bacterias lácteas deben estar vivas y en gran cantidad (107/g o más) en el producto final hasta la fecha límite de consumo.

Esto garantiza sus propiedades activas para la salud del organismo. Esta definición de yogur es compatible con la legislación vigente. Como un derivado, es decir, producido a partir de la leche, el yogur hereda sus beneficios nutricionales. El consumo regular de yogur es muy interesante desde el punto de vista nutricional, teniendo en cuenta que proporciona nutrientes muy importantes para el organismo.

Nutrientes del Yogur:

Muchos de ellos son indispensables para una alimentación sana.

  • Proteínas de alto valor biológico, ricas en aminoácidos esenciales, de calidad equivalente a la de la carne, el pescado y los huevos.
  • Minerales, de los que destaca el calcio, que tiene la particularidad de presentar una alta biodisponibilidad, siendo fácilmente cedido y absorbido por el organismo, lo que no sucede con otras fuentes de calcio que no son derivados de la leche como, por ejemplo, los vegetales. De este modo, el yogur, el queso y la leche son los alimentos que más activamente contribuyen a la calcificación de los huesos en todas las etapas de la vida, previniendo la osteoporosis.
  • Vitaminas, especialmente del complejo B, pero también la vitamina A.

Además, el yogur es un alimento con buena digestibilidad, con una buena tolerancia digestiva (aunque contiene lactosa, el yogur puede ser una opción para ciertas personas que tienen dificultades para digerir este azúcar, ya que las bacterias lácticas del yogur ayudan a separar la lactosa de los dos azúcares que la componen, la glucosa y la galactosa). Además, tiene efectos beneficiosos intestinales que ayudan a mejorar el funcionamiento del intestino.

Quién debe consumir yogures

Está claro que el yogur es un alimento con alto valor nutritivo que se recomienda en todas las edades (desde la infancia a la tercera edad), en determinados estados fisiológicos (embarazo, lactancia y menopausia) y aún en la exigente alimentación de los deportistas (siendo un importante valor añadido importante para su alimentación diaria).

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Yogures en las dietas

En la actualidad, existe una creciente conciencia de la necesidad de llevar a cabo dietas con rigor y criterio, ya que la eliminación de determinados alimentos implica una escasez nutricional grave, con las consecuencias perjudiciales para la salud que ello podría tener. La leche y sus derivados (yogur y queso) no son alimentos que deben eliminarse cuando se inicia un régimen. Por el contrario, como se desprende del análisis de sus beneficios nutricionales.

Al incluir alimentos tan ricos como la leche y sus derivados en una dieta hipocalórica, se evita la posible deficiencia de nutrientes clave. La leche y el yogur son, además, alimentos de bajo valor calórico, que es aún menor si la opción recae sobre la variedad light.

Los yogures y leches delgadas tienen la misma riqueza nutricional que los que se presentan en la variedad semidesnatada, con un contenido de grasa inferior. Por lo tanto, son la opción para un aporte calórico aún menor.

Los diferentes tipos de yogur

Hoy en día, podemos producir yogur de excelente calidad, todos ellos manteniendo los beneficios nutricionales del mejor yogur. De hecho, ofrecemos yogur para los gustos más exquisitos y exigentes. Después de los clásicos yogures naturales, de aromas y de trozos, tenemos hoy a disposición yogures líquidos, magros, probióticos, bicompartimentados, de pura pulpa de frutas y cremosos, entre otros.

El yogur fermentado es el más común. El yogur pertenece estrictamente a la familia de las leches fermentadas. Sin embargo, el término yogur (como se desprende de la definición de yogur presentada) se utiliza únicamente si se utilizan en la fermentación las bacterias Lactobacillus Bulgaricus y Streptococcus Termophilus.

La leche fermentada propiamente dicha se obtiene de la leche por fermentación de otras bacterias lácteas (en presencia simultánea o no de bacterias específicas del yogur), como el Bifidobacterium longum o el Lactobacillus acidophilus. Lo que distingue un yogur de una leche fermentada son, por tanto, las bacterias utilizadas para la fermentación.

Mejor conservación del yogur

El yogur es un producto que necesita mantenerse refrigerado entre 0 y 6° C para mantener su validez. El tiempo de conservación es aproximadamente 28 días después de la fabricación.