Es algo común que nuestros hijos tengan pesadillas, sobre todo a partir de los dos años, aunque se dice que son mucho más comunes según se va haciendo un poco más mayor. Hoy te vamos a dar unos consejos para ayudar a los niños a superar este mal trago.
La mayor parte de las veces, las pesadillas ocurren por algo que ven en la televisión o que suelen padecer durante el día, por eso debemos de estar muy atentos para saber cuál es la causa.
Si el niño está teniendo una pesadilla debemos de ir con ellos para intentar calmarlos lo antes posible. Les hablaremos de una manera tranquila para relajarlos y estaremos con ellos un breve espacio de tiempo.
No debes de forzarlos para que hablen de las pesadillas, pero si ellos lo hacen, entonces se hablará de manera natural. No es aconsejable llevarse el niño para la cama de los padres, porque de esta manera le estaremos dando más importancia y él puede asustarse más cuando esté solo en su propia habitación.