Quizás la pregunta nos parezca un tanto ridícula pero desde luego tiene su base y ahora veremos el por qué. Hoy en día, es mucho más sencillo tomarnos un vaso de zumo que ponernos a comer una pieza de fruta, ya que siempre nos vamos a lo rápido, pero tenemos que pensar en lo nutritivo.
Para ello, hay que saber que lógicamente tanto el zumo como la fruta tienen altos contenidos de vitaminas, pero desde luego, con la fruta entera estaremos ingiriendo toda la fibra y los nutrientes.
Sin embargo, cuando tomamos zumo, parte de ellos, se pierden. La naranja, mientras que la cortamos, exprimimos y bebemos, va perdiendo las vitaminas poco a poco, por eso, es siempre más recomendable aprovecharlas consumiendo la pieza.
Con esto, no queremos desprestigiar a los zumos y por ello, recurriremos a estos sabrosos refrescos antes de hacerlo con bebidas azucaradas, pero nunca sustituirán a las piezas de fruta, que son muy necesarias cada día.