Los que tenemos el trabajo en el centro de una gran ciudad, tenemos que sufrir cada día, los atascos que se producen tanto cuando entramos en ella, como cuando salimos. Es una situación incómoda que nos puede acarrear un estrés innecesario, por eso, vamos a evitar este mal e intentar relajarnos.
Estar parado en un atasco, nos hace pensar en los problemas y nos causa una sensación de agobio y ansiedad, que tenemos que evitar a toda costa. A veces, no es fácil, pero tenemos que intentar relajarnos y aprovechar esos momentos para pensar en planes futuros, que nos levanten el ánimo.
Poner música que nos guste y nos evada, además, haremos ejercicios de respiración para que nos vayan relajando poco a poco. De nada sirve pensar en que ya teníamos que estar trabajando o en casa, cuando es el camino contrario…esto solo hará que nos pongamos más nerviosos.
Así que, eliminaremos todo tipo de pensamiento de esta índole. No haremos nada más que ponernos peor, así que, tendremos que afrontar la situación como es, un tiempo que tenemos para nosotros mismos, con música y un ambiente relajante…aunque no podremos relajarnos mucho, que estamos ante un volante.