Según va pasando el tiempo y vamos cumpliendo años, el pecho es una de las zonas de nuestro cuerpo que más sufre, por eso, hoy vamos a mantenerlo en su sitio con unos ejercicios muy sencillos. Además, podemos complementarlos con cremas reafirmantes e hidratantes.
El primer paso a seguir para comenzar con nuestra rutina de ejercicios es hacernos con unas mancuernas y que tengan poco pero para no dañarte, ya que poco a poco podrás sumarle más. Tumbada boca arriba y con los brazos en cruz, debes de ir levantándolos hasta que las pesas se toquen. Solo necesitas mover los brazos, el resto del cuerpo permanece inmóvil.
Otro de los ejercicios que desde siempre nos han recomendado es, manteniéndote de pie, bien recta, deberás juntar las palmas de las manos a la altura del pecho y hacer fuerza, como si tratáramos de aplastarlas. Repite el ejercicio unas 15 veces, respirando y haciendo pausas para volver a continuar.
Podrás complementar estos ejercicios con algún truco casero como la clara del huevo, bien batida hasta que llegue a punto de nieve. La aplicarás con cuidado sobre tu pecho con un ligero masaje. Este producto le aportará el colágeno que necesita.