Conocemos muy bien la dieta mediterránea pero quizás un poco menos, su hermana, la atlántica y desde luego, es otra de las opciones ideales para que tu corazón siga en pleno funcionamiento durante mucho más años. Sin duda, formará parte de nuestro estilo saludable de vida.
Esta dieta se basa en el consumo de pescados y mariscos, además de las verduras y las hortalizas. Los lácteos también están presentes al igual que la carne, pero en menor medida que el pescado.
Lo ideal es que esas verduras sean acompañantes de los platos principales, que como decimos son el pescado y todos los mariscos. Esta dieta previene las enfermedades cardiovasculares, ya que sus alimentos contienen grasas vegetales, vitaminas y minerales.
Además para hacerla más completa, se deben evitar los fritos, ya que, lo recomendable será a la plancha o cocidos. Los platos de cuchara como el cocido y los guisos, no pueden faltar en nuestra dieta, al igual que un vasito de vino, que los acompañe.