Cuidar nuestro cuerpo y como no, nuestra mente siempre ha sido un buen equilibrio para sentirnos más sanos. Bien es cierto que cuando las cosas se nos van de las manos, ya estamos ante una situación un tanto más peligrosa y todos sabemos que el culto al cuerpo es algo muy común en nuestros días.
Como decimos, hasta cierto punto está bien que nos mantengamos en forma o que vayamos al gimnasio a sacar un poco de músculo, pero la preocupación llega cuando se convierte en una obsesión.
Un culto al cuerpo que nos lleva a pasar más horas en el gimnasio y a sacrificar nuestro cuerpo más de lo necesario. Es un desorden psicológico que afecta a más hombres.
Además del ejercicio, también esta enfermedad va acompañada de una estricta dieta y en ocasiones se ve unido al consumo de anabolizantes, que puede provocar problemas cardíacos, así como de fertilidad.