Muchas dietas nos quitan el pan, pero en otras, nos aconsejan comerlo por su alto contenido en fibra y otros nutrientes. Dentro de él, podremos encontrar en blanco, que es el más común o el integral que cada vez está cogiendo más fuerza y por eso, vamos a ver sus diferencias.
Parece ser que para la elaboración del blanco se le quitan alguna de esas vitaminas, algo que en el integral se sigue manteniendo. Por eso, éste tiene alta cantidad de fibra y es mucho más fácil de digerir que el blanco.
También es cierto que en ciertas elaboraciones del pan blanco, se le añade una mayor cantidad de ácido fólico y calcio. Desde luego, lo mejor es añadir o consumir con el pan con otros alimentos que nos proporcionen esas vitaminas que nos faltan.
Desde luego, por lo que vemos, es más natural y ligero, además de tener muchas más vitaminas, pero el blanco es otra forma de acompañar nuestras comidas más sanas.