Todo el mundo es consciente de la importancia de las verduras en una alimentación equilibrada. Sin embargo, varios estudios internacionales han demostrado a lo largo del tiempo que hacemos un consumo inferior al recomendable en nuestro menú diario. Esto puede causar una mayor incidencia de problemas de sobrepeso y un mayor riesgo de enfermedades como la hipercolesterolemia y algunos tipos de tumores.
Y no es sólo por la falta de fibras y sustancias antioxidantes, sino también porque una ingestión adecuada de vegetales puede ayudar a reducir los niveles de grasas e hidratos de carbono de absorción rápida, que normalmente están muy por encima de lo que se recomienda. Sobre la base de esta premisa, la Dieta Verde propone adelgazar con abundantes porciones de verduras, que cubren las necesidades diarias de vitaminas y minerales.
También tiene muchos beneficios para el organismo. Llena de antioxidantes y fibra para perder peso de forma rápida y saludable, también ayuda a desintoxicar el organismo, reducir los niveles de colesterol y prevenir el cáncer. Y para que el menú sea equilibrado y no haya carencias, las verduras van acompañadas de alimentos seleccionados:
Hidratos de carbono de absorción lenta
La lista incluye pan, arroz, pasta y patatas. Son el principal proveedor de energía, por lo que la cantidad a ingerir debe ser definida en función de la energía gastada (cuando se quiere perder peso la cantidad que se ingiere debe ser inferior a la energía gastada), pero nunca deben ser excluidos de la alimentación.
Alimentos ricos en proteínas
El huevo, el pescado y la carne, junto con grasas buenas (no saturadas), como el aceite de oliva, forman parte de esta lista. Recuerde, sin embargo, que aunque el aceite es una grasa no saturada, sigue suministrando 9 calorías por gramo ingerido, al igual que las demás grasas. «La grasa es el nutriente que debemos ingerir en menor cantidad, incluso cuando se trata de una grasa no saturada», subraya Marisa Costa.
Consumo de antioxidantes
La actitud más saludable es tratar de ingerir la mayor variedad posible de verduras, ya que cada una tiene sus cualidades específicas. Por lo tanto, la Dieta Verde incluye diferentes opciones en el menú diario para que pueda disfrutar de todos sus beneficios. Es el caso del ácido fólico de las coles, el licopeno de los tomates, la fibra de los espárragos y las acelgas, la vitamina C y el betacaroteno de las espinacas, las zanahorias y el pimiento rojo.
Todas estas sustancias hacen de las verduras verdaderos remedios naturales para el organismo, lo que les confiere beneficios adicionales:
- Poder drenado y depurado, garantizado por ingredientes como la alcachofa, los espárragos y la remolacha.
- Protección de la piel, garantizada con la zanahoria, el pimiento rojo y las espinacas.
- Poder revitalizante, que proporcionan alimentos como los tomates y las uvas.
- Alivio de los problemas respiratorios con ayuda de puerros, cebolla y ajo.
Propiedades adelgazantes
La composición nutricional equilibrada de las verduras las hace la mejor opción para adelgazar de forma rápida y saludable. Sus propiedades adelgazantes se deben a varios factores:
- Contenido mínimo de grasas, que casi nunca superan los 0,8 g por cada 100 g de producto.
- Gran contenido de fibras hidrosolubles, que ayuda a saciar el apetito y a acelerar el proceso digestivo, reduciendo la absorción de grasa intestinal.
- Alto contenido de agua, que reduce al mínimo el aporte calórico de estos alimentos.
De esta forma, aprovechará al máximo todos los beneficios de las verduras:
- Prepárelas antes de usarlas para evitar que el oxígeno destruya la vitamina C.
- Intente cocinarlas al vapor para aprovechar todos sus nutrientes. Si las hierves, disfruta del agua de la cocción porque así preservarán todas sus vitaminas y minerales.
- Si no está segura de la calidad de las verduras frescas, elija las congeladas, que tienen todos sus nutrientes intactos.
¿Cuál es la temporada de cada una?
Aunque, gracias a los invernaderos y a otros sistemas de cultivo, pueden consumirse a lo largo del año, es recomendable elegir las de la temporada para garantizar una mejor relación precio / calidad:
- Acelgas, guisantes, alcachofas y coles de bruselas en primavera
- Acederas, zanahorias, remolachas, papas, pepinos, cebollas, calabacines y frijoles en verano
- Nabos, setas, berenjenas, puerros, achicoria y apio en otoño
- Espinacas, col de saboya, coliflores, apio y achicoria en invierno
Aprende a elegir
El primer paso para aprovechar todas las ventajas de las verduras es comprarlas en perfecto estado de conservación. Aquí te presentamos algunos consejos de compra:
- Asegúrate de que tengan un aspecto fresco, y sean firmes al tacto. No compres una verdura sin color y con un aspecto marchito.
- No compres más de lo que puedes ingerir en dos o tres días. Guárdelas en el cajón inferior de la nevera para que no queden expuestas a la luz.
- Si están envasadas en una bandeja, separarlas antes de guardarlas en la nevera. Si el envase es una bolsa de plástico hermética, déjela así hasta que se consuma.
- Intente comprar las variedades de verdura que están en su época.
- Si adquiere verduras congeladas, evite el envasado o la capa de hielo por fuera. Una vez descongeladas, no se pueden volver a congelar.
¿Que te parece? ¿Nos ponemos a dieta? 😉