Las recién estrenadas mamás tienen un doble cambio, ya que tras la llegada del bebé, todo cambia…para mejor y nuestros hábitos están en todo momento relacionados con el pequeño, al igual que la alimentación.
Tenemos que tener en cuenta que si estamos dando el pecho, el calcio tiene que ser parte fundamental de nuestra dieta. Debemos de tomar unos cinco vasos de leche diarios, aunque los podremos complementar con derivados como el queso o el yogur.
La vitamina C tiene que estar presente y la encontraremos en los pimientos, en los cítricos y en espinacas o frutas como los plátanos. Otra de las vitaminas principales en este período es la D.
La podremos encontrar en los huevos y pescados. Una dieta equilibrada y saludable es lo más importante y en ella, no podrán faltar los frutos secos, aunque para cualquier duda, quien mejor te puede ayudar será tu médico.