Hay muchas razones para notar una evidente hinchazón en los tobillos. Puede ser que alguno de los órganos principales de nuestro cuerpo no funcione de una manera correcta, como pueden ser los riñones, además, si tienes una dieta alta en sal y grasa o retención de líquidos también notarás este mal.
Algunos medicamentos también pueden hacer que nuestros tobillos se hinchen más de la cuenta o motivos como el embarazo. Para comenzar, deberíamos de vigilar nuestra dieta, eliminando la sal, el azúcar o las carnes rojas, pero sí beber mucha agua.
Las dietas depurativas de solo un día o dos, pueden ser muy beneficiosas para eliminar las toxinas de nuestro cuerpo. Suelen constar de abundantes líquidos que provienen de frutas ricas en vitaminas.
Debemos de darnos baños de agua con sal en la zona y siempre y cuando podamos, hacer un poco de ejercicio. Sin duda, para determinar que no haya problemas mayores, debemos de acudir siempre al médico.