Nosotros damos una de cal y otra de arena, porque bien es cierto que tenemos que cuidarnos y hacer ejercicio pero por otro lado, un caprichito nunca viene mal. Hoy ese capricho tiene forma de bombón y desde luego, es una receta muy sencilla.
Para comenzar necesitarás 200 gramos de chocolate fondant, o puro, o la misma cantidad de chocolate blanco o con leche, porque cada uno tiene su gusto y esta receta admite todas las posibilidades. Fundimos el chocolate y lo echamos en las cubiertas, dando pequeños golpes para que no se forme burbujas.
Luego las volcamos sobre una bandeja para que caiga el exceso de chocolate. Metemos las cubiteras al congelador unos minutos y reservamos ese chocolate sobrante para luego cubrir y cerrar el bombón. Pasados unos minutos sacamos las cubiteras del congelador y es el momento de rellenar nuestro bombón.
Yo hice crema de fresa, tipo flan que ya vienen en bolsitas. También puedes deshacer unas magdalenas o bizcocho y añadirle leche condensada hasta formar una pasta. Echaremos un poco sobre lo que será el bombón y lo taparemos con una nueva capa de chocolate. Dejaremos en el congelador, hasta media hora antes de consumir.